La inclusión en el trabajo permite generar condiciones de paz que se reflejan en un entorno laboral seguro, digno y respetuoso para todos los colaboradores.
Trata con el mismo respeto a todas las personas, independientemente de su género, orientación sexual, identidad, puesto laboral o cualquier otra condición.
Gestiona los conflictos desde el diálogo y la empatía, evita que tus emociones te lleven a lastimar a tus compañeros y compañeras.
Promueve condiciones dignas de trabajo al no participar, reproducir o apoyar tratos discriminatorios hacia otros compañeros. Si observas algún caso de discriminación, apoya a la víctima y denúncialo.
Defiende que se pague de forma igualitaria a hombres y mujeres por el mismo trabajo.